De Maldicion A Bendicion (Parte 2)

Me alegro de estar nuevamente con usted para compartir las preciosas verdades que se encuentran en las escrituras y que han hecho la diferencia entre el fracaso y el éxito en mi vida y que pueden hacer lo mismo para usted.El título de mis charlas esta semana es “De la maldición a la bendición”, estaré compartiendo con usted verdades de las escrituras que probablemente usted nunca ha oído antes y que tienen el poder de cambiar el destino total de su vida.

En mi primera charla de ayer expliqué que el fundamente de todas las provisiones de Dios para nosotros es el intercambio ordenado divinamente que tuvo lugar cuando Jesús murió en la cruz; muy sencillamente Dios permitió que el mal que merecíamos nosotros por nuestra rebelión cayera sobre Jesús para que el bien que merecía Jesús por su obediencia pudiera sernos ofrecido a nosotros.

Hay muchos aspectos diferentes y mencioné solo unos pocos:

• Jesús fue castigado para que pudiésemos ser perdonados
• Fue herido para que pudiésemos ser sanados.
• Gustó nuestra muerte para que pudiésemos compartir su vida.
• Se hizo pecado para que pudiésemos ser hechos justos.
• Sufrió el rechazo para que pudiésemos ser aceptados, y más ….

Pero en mi charla de ayer hablé de una verdad en particular de este intercambio, respecto del cual la mayoría de los cristianos no han recibido enseñanza alguna, así lo dice el apóstol Pablo en Gálatas 3, versículos 13 y 14:

“Cristo nos redimió de la maldición de la ley, hecho por nosotros maldición (porque está escrito: Maldito todo el que es colgado en un madero, para que en Cristo Jesús la bendición de Abraham alcanzase a los gentiles, a fin de que por la fe recibiésemos la promesa del Espíritu.”

El intercambio entre el mal y el bien, lo malo es la maldición, lo bueno es la bendición, Jesús fue hecho realmente maldición cuando colgó en la cruz, pero está de acuerdo con las palabras del libro de Deuteronomio donde Dios dijo por medio de Moisés “Maldito todo el que es colgado en un madero”.La cruz es el madero, de modo que cuando Jesús colgó en la cruz todo judío que conocía las escrituras del Antiguo Testamento sabía que Jesús había sido hecho una maldición. Lo que no entendieron y que solo puede ser revelado por el Espíritu Santo en la razón por la que fue hecho maldición, fue hecho maldición para que nosotros pudiésemos ser redimidos de la maldición y pudiésemos heredar la bendición de Dios.

Y sobre eso vamos a platicar ahora, el intercambio entre la maldición y la bendición, la transición por medio de la cual pasamos de la maldición a la bendición.

Hoy quiero explicar la naturaleza de las bendiciones y de las bendiciones y la manera en que opera; las bendiciones y las maldiciones toman esencialmente la forma de palabras, pueden ser habladas, escritas sencillamente pensadas, pero estas palabras se convierten en instrumentos de poder sobrenatural, no son palabras ordinarias, eso no las haría bendiciones o maldiciones, son palabras que han sido cargadas con cierta clase de poder sobrenatural.Las bendiciones producen efectos buenos, las maldiciones producen efectos malos, las bendiciones proceden de Dios o de hombres que representan a Dios, igualmente las maldiciones. Dios pronuncia maldiciones y hombres que representan a Dios pronuncian maldiciones pero existe un punto adicional con las maldiciones que también proceden de Satanás y de hombres que representan a Satanás, Satanás no puede bendecir a nadie.

Bien, este es el punto más importante, quiero que lo escuche con cuidado; una vez pronunciadas, las bendiciones y las maldiciones tienden a continuar a través del tiempo, de generación a generación hasta de siglo a siglo hasta que son revocadas. Normalmente una vez que una maldición o una bendición ha sido pronunciada, continuará hasta que algo suceda para cancelarla o revocarla.Esto significa que pueden haber fuerzas operando en nuestras vidas que fueron puestas en acción originalmente en generaciones pasadas hasta siglos atrás, como consecuencia pudiéramos estar tratando con cosas en nuestras vidas y circunstancias en nuestra familias, en nuestro temperamento, que no se pueden explicar exclusivamente en términos de lo que ha sucedido en nuestra vida o experiencia personal, las raíces de causa pudieran remontarse a tiempos antaño, generaciones atrás y hasta miles de años atrás.

La historia tiene muchos ejemplos del desarrollo de las maldiciones y las bendiciones, comenzaré tomando algunos ejemplos de la Biblia, primeramente de las bendiciones.Aquí hay un ejemplo de Génesis 22, del versículo 15 al 18, de una bendición muy importante, pronunciada sobre Abraham:

“Y llamó el ángel de Jehová a Abraham por segunda vez desde el cielo,  y dijo: Por mí mismo he jurado, dice Jehová, que por cuanto has hecho esto, y no me has rehusado tu hijo, tu único hijo; - Se refiere a la disposición de Abraham de sacrificar a su hijo Isaac en el monte Moria. Sigue diciendo Dios - de cierto te bendeciré, y multiplicaré tu descendencia como las estrellas del cielo y como la arena que está a la orilla del mar; y tu descendencia poseerá las puertas de sus enemigos. En tu simiente – o descendencia, es la misma palabra - serán benditas todas las naciones de la tierra, por cuanto obedeciste a mi voz.”

Esa bendición fue pronunciada hace cuatro mil años y todavía está en efecto hoy, una evidencia es este programa que usted escucha porque la bendición que usted recibe del programa es por Jesucristo, de la cimiente de Abraham, y por la bendición pronunciada hace 4 mil años, usted es bendecido ahora mismo si recibe este mensaje. Como usted ve las bendiciones continúan de generación en generación, de siglo en siglo.

Veamos ahora algunos ejemplos de maldiciones, primeramente una que fue pronunciada por Dios en Génesis 12:3 cuando llamó a Abraham para que saliese de Ur de los caldeos a una tierra que le daría, alguna de las promesas que Dios le hizo a Abraham fueron estas:

“Bendeciré a los que te bendijeres y a los que te maldijeren maldeciré, y serán benditas en ti todas las familias de la tierra.”

Note que en medio de la bendición hay una maldición “maldeciré a los que te maldijeren”. Esto mismo fue dicho más tarde cuando Isaac el hijo de Abraham, bendijo a su hijo Jacob.En Génesis 27:29 dice esto:

“Sírvanle pueblos y naciones se inclinen a ti, se señor de tus hermanos y se inclinen ante ti los hijos de tu madre; malditos los que te maldijeren y benditos los que te bendijeren.”

Otra vez lo mismo, si alguien te maldice, Jacob, Dios lo maldecirá, esto es algo que continua a través de la historia, en términos modernos esta es la protección de Dios contra el “antisemitismo” , antisemitismo es la actitud y el espíritu que maldice a Abraham, a Isaac, a Jacob y a sus descendientes, el pueblo judío. Y cualquiera que ceda ante ese espíritu de antisemitismo o haga pronunciamientos negativos o declaraciones que son falsas contra el pueblo judío se está exponiendo a la maldición pronunciada por Dios hace más de tres mil años.Y si usted ve la historia de todas las naciones y los imperios en los últimos tres mil años que se han vuelto contra el pueblo judío, que lo han perseguido, que han intentado destruirlo, encontrará que cada uno de estos ha entrado bajo la maldición de Dios, esta es una realidad histórica, sigue funcionando en nuestro mundo de hoy, solo tenemos que considerar de los años de 1930 y 1940 en Alemania y Europa para probar que esto es cierto.

Voy a darle otro ejemplo sorprendente, cuando Saúl y Jonathan su hijo murieron en la batalla contra los filisteos David pronunció un lamento poético muy hermoso y porque habían sido matados en las montañas de Gilboa, David dijo algo sobre esos montes que quiero leer, en 2 Samuel 1:21.

“Montes de Gilboa,Ni rocío ni lluvia caiga sobre vosotros, ni seáis tierras de ofrendas;Porque allí fue desechado el escudo de los valientes,El escudo de Saúl, como si no hubiera sido ungido con aceite.”

Yo no sé si David sabía exactamente lo que estaba diciendo, pero dijo a ese grupo particular de montes “Ni rocío, ni lluvia caiga sobre vosotros”, esa es una maldición y fue pronunciada hace cerca de tres mil años, si usted puede ir a esa área de Israel hoy y el pueblo judío ha sido capaz de reforestarla, han sembrado árboles en todos los montes y collados pero no pueden hacer que nada crezca en los montes de Gilboa.¿Porqué? … Porque David pronunció una maldición hace tres mil años. ¿Se da cuenta lo real que es todo esto? … Muchos de nosotros tenemos que ajustar nuestro pensamiento porque estamos enfrentando fuerzas invisibles que no podemos entender.

Ahora quiero darles dos ejemplos rápidamente de la historia reciente, ambos en los años de 1600 y extrañamente los dos de la tierra de Escocia, los escuché personalmente de personas que estaban mezcladas en el asunto, primeramente de una señora que conocí en Australia en diciembre de 1984, cuando ella escuchó mi enseñanza sobre la maldición me buscó, después me escribió una carta en que me mostraba una maldición que había sido pronunciada sobre su clan hacia muchos años en Escocia, por no menos que la persona del obispo de Edimburgo, una maldición espeluznante.Y en efecto lo que ella decía es: Mi familia todavía lucha hoy contra los efectos de esta maldición. Y en noviembre de 1985 cuando conocí en Escocia a un descendiente de una familia de la aristocracia escocesa, que también reconocía que él y su familia estaban bajo una maldición, la historia es que en los años de 1600 hubo una guerra entre dos clanes y un miembro de su clan había asesinado a otros miembros del otro clan en cuenta a una mujer en cinta.Y la moribunda pronunció una maldición sobre ese clan, y este hombre muy inteligente con toda seriedad me dijo. La maldición todavía opera. En ambos casos las personas sentían en efecto en accidentes extraños, enfermedades, disputas familiares, problemas económicos, enormes frustraciones aunque eran cristianos nacidos de nuevo.Así de real son las bendiciones y las maldiciones.

Bueno, nuestro tiempo de hoy terminó, regresaré mañana a la misma hora, mañana estaré compartiendo con usted como puede reconocer usted la operación de una maldición, quizá lo dirija hacia la solución de problemas que usted no ha podido resolver hasta ahora.